Actualmente el desarrollo de la tecnología abarca un sin fin de posibilidades, al punto de que la vida en sí misma es una experiencia que transcurre paralelamente con la ciencia y la innovación. Son muchos los ámbitos que han cambiado desde que se vieron inmersos en su desarrollo y como consecuencia las oportunidades que tenemos para ampliar el conocimiento sobre la realidad son más efectivas … y porqué no, también divertidas.
El hecho más reciente en donde se puede ver el diálogo entre tecnología y realidad tuvo lugar en el volcán Kilauea en Hawái (EE.UU.) en donde un guía turístico, Eric Storm, tomó la decisión de registrar en video la actividad volcánica de una manera más extrema, alojando su cámara GoPro en una grieta por donde fluiría la lava, tal como se evidencia en el portal PetaPixel.
Originalmente Storm tenía planeado hacer un registro corto de la lava y luego retirar la cámara de la grieta, no obstante, mientras cumplía con su labor compartiendo una historia del lugar con los turistas, perdió de vista su cámara y el inminente paso de la lava la absorbió.
El auge de las cámaras GoPro se dio en gran medida porque su uso y sus funciones están pensados para adaptarse a condiciones extremas, así que la palabra indestructibilidad es usada comúnmente en sus anuncios publicitarios. En cuanto a la cámara que quedó atrapada por la espesa lava, se informó que sobrevivió a los 1.000°C (1.832°F) según Peta Pixel.
El dispositivo en el momento contaba con la cubierta protectora que en gran medida fue la que soportó las altas temperaturas y que terminó en parte consumida, pero que disminuyó los riesgos de que la cámara terminara fundida.
A la hora de revisar en qué condiciones había quedado la cámara, Storm se llevó la sorpresa de que la SD en su interior aún estaba intacta y que además la cámara continuaba grabando.
Mira aquí el video: